domingo, 26 de julio de 2009
COMPLCIDAD
El viento en los arboles, la ciudad encendida a lo lejos, la brisa en el aire, la noche cae poco a poco mientras la casa cobra un silncio casi espectral solo disfrutado por algunos grillos. En la habitacion, dos amantes transforman el lugubre ambiente en un perfecto momento de calma. La vida pasa tranquila, el viento acompaña sus palabras, los arboles festejan su fortuna. En la habitacion duermen los dos amantes, abajo en la sala, un alma añorando su vida, envidiando la fortuna de aquells complices del viento, deseando paz, extrañando su antigua suerte, solo siente el aire helado de la noche, la brisa cruel del cielo, el rugir bravo de los arboles y el fulgor de la ciudad se vuelve su claustro eterno.
domingo, 19 de julio de 2009
DONDE REINA LA OSCURIDAD
Me pregunto ¿cuánto mas necesito? son las 4 de la mañana, una extraña sensación de soledad recorre mi espalda, entre las sombras convivo con mis pensamientos, con ecos resonantes, en mis sueños, en mi mente. Una tenue luz blanca envuelve mi rostro, miro alrededor y me sigo preguntando ¿cuánto más necesito? Mi estomago vacio, mi mirada cansada, no puedo evitar esa sensación incomoda de tristeza, incompleto, desolado, dirijo la mirada de vez en cuando al fondo del cuarto, hacia las oscuras esquinas, espesas y nebulosas... quiero gritar, pero no puedo, quiero llorar, pero ya no hay lagrimas. esta aqui dentro, arañandome desde el fondo de mi alma, tiene que salir, quiero que salga, pero esta ahi, en el fondo, anclado a mi, una raiz que no deja de crecer. Solo en mi cuarto reflexiono ideas que no se han completado, divago, imagino, fantaseo, aqui en las poderosas sombras, en mi lecho de soledad y tristeza. Tiene que salir, pero... en realidad no lose, dudo, pienso un momento y me sigo preguntandome, ¿cuánto más necesito?...
martes, 14 de julio de 2009
EL DUELO
Ahí estaba, entre las sombras del valle oscuro, arrojado de un paraíso cruel, bajo las negras nubes, entre los espinosos arbustos, abrazando mis sueños mas preciados, observándolos desvanecerse entre mis dedos. Entre demonios camino, con todas las fuerzas de mi alma subyugada, destrozada, desgarrada, huyendo del cruel destino, corriendo hacia una luz cegante en la lejanía. Camino lento y pesado, la luz se aleja a cada paso, errores de mi ser, descuidos de mi razón, los demonios gritan en mi interior, blasfeman, maldicen. Gritándole al viento camino por el sendero inestable, observando el horizonte me siento condenado a este mundo irreal que enajena mi mente de todo lo sagrado. Aúllan a la oscuridad, me destrozan por dentro, al frente esperan por mi, pacientes observan mi llegada esclavos de mi agonía, verdugos de mi felicidad. El sendero se acorta, la luz se aleja, el cielo ruge, mi alma llora, clama paz, el miedo me entumece, volteo al cielo por un instante, una visión se apodera de mi, el infinito esta a mi merced, lo veo... es el momento, mi llanto marca el final y mi soledad el principio, es el momento, momento de enfrentar a mis demonios... momento del duelo.
martes, 7 de julio de 2009
PROHIBIDO SOÑAR
Pierdeme, arrebatame la vida un instante, arrancame estos ojos pecadores, quemame estas manos inestables. juego en mi mente, lucho en mi alma, quiero tenerte, radiante, esplendida. quiero tenerte, admirarte. Dulce joya prohibida, aroma a sensates, sabor a placer. Quiero tenerte, quiero probarte, arrebatarde de tu destino, arrancarte de tu ajeno placer. Atraparte en mis brazos, robarte a tu suerte, irresistible, ejena, quiero tenerte, arrebatarte de tu lecho, atraparte en el mio, quiero tenerte, perfecto sueño ajeno.
AL OTRO LADO
lo hare? me preguntaba, sere capaz? frente a la computadora, el valor huia de mis dedos, el nervicismo inundaba mi cuerpo, mis dedos apenas y acertaban a las teclas, esperando un haz de oportunidad, entre dialogos y frases incompletas me estremecia al pensar en el resultado de tan osado acto, sere capaz? me seguia preguntando. por un instante no hubo palabras, hasta donde me llevara? me preguntaba. en la pantalla seguian las ultimas frases enviadas, una respuesta y mis manos comenzaron a escribir, sudando, nervioso, lo dige, ahi estaba, esa frase tan reservada. ahora que? mis cuerpo temblando, esperando la respuesta, imaginaba las posibilidades, mil veces repase la platica, sorpresivamente, la respuesta regreso igual que mi confesion. sera posible? no lo creia, no podia imaginar el significado de eso. no podia ocultarlo, me llenaba de cierto ego tal confesion. pero como? porque? no podia responder, sin embargo ahi estaba, del otro lado de la ciudad, pasiente, serena. que pasara ahora? no podia creer tal suceso. me detenia a pensar, keria estar del otro lado, ahi, donde pudiera habalr, donde pudiera expresar lo que sentia, desde mi boca, pero me detenia, sabia ke era imposible, la distancia? no...la realidad, intocable, ejena. sumergido en mi ansia, desesperado, ¿cuándo? ¿te vere? de que sirve, solo verte, solo apreciarte. te vuelvo a confesar, te reservo en mi onirico mundo, te resguardo como un secreto incompremdido, alejada de mi, en un mundo con fronteras de hierro, impenetrable, alejado. me atrevere? me pregunto una vez mas, mis manos te escriben, pero mi ser te añora, quiero ceder, quiero ceder, pero no puedo, atrapado en este maldito mundo de vonvencionalismos morales, sin valor, sin coraje, quiero ceder, un rose solamente, una caricia, un beso tal vez. me atrevere? no lo se. en silencio te añoro, en fantasias te invento, en mi mundo vives, eterea, onirica. un secreto un sueño, resguardado, inalcanzable. quiero ceder, solo una vez, quiero ceder, deshechar el miedo, hacerte realidad.
lunes, 6 de julio de 2009
ME ENAMORE DE LA LUNA (PARTE2)
Desdicha la mía la de la noche más estrellada, cuando se me arrebato mi precioso destino. Acostumbrábamos pasear por el lecho de un pequeño arrollo, cada noche antes del amanecer nos despedíamos con tristeza, se elevaba a los cielos y caía en su sueño hasta la siguiente noche. Esa vez caminamos más de lo acostumbrado, dejándonos llevar por nuestras emociones, entre caricias y abrazos, entre mis versos y mi admiración nos descubrió el día, engalanado por el Sol. No pude evitar notar la gracia en el rostro de mi amada Luna al ver sus resplandecientes halos de luz ardiente, mayor envidia no he conocido en esta vida.
Desde aquel entonces la Luna subió al cielo y se alejo de este mundo para poder admirar más a su cálida novedad. Ahí esta, aun engalanada por las estrellas, con su mirada observando al Sol, esperando el día en que este pueda extinguir sus llamas para poder abrazarlo con todas sus ganas, espera paciente, envuelta en los tibios rayos de su nuevo amante diurno, mientras yo le canto cada noche desde aquella colina que un día me uniera a ella, admirándola, amándola, tratando de alcanzarla una vez más desde aquí, en mi mundo mortal.
Desde aquel entonces la Luna subió al cielo y se alejo de este mundo para poder admirar más a su cálida novedad. Ahí esta, aun engalanada por las estrellas, con su mirada observando al Sol, esperando el día en que este pueda extinguir sus llamas para poder abrazarlo con todas sus ganas, espera paciente, envuelta en los tibios rayos de su nuevo amante diurno, mientras yo le canto cada noche desde aquella colina que un día me uniera a ella, admirándola, amándola, tratando de alcanzarla una vez más desde aquí, en mi mundo mortal.
ME ENAMORE DE LA LUNA (PARTE 1)
Me enamore de la luna, me cautivo su perfecta figura enmarcada por millones de astros que engalanan su dulce cara. Me paseaba esa noche por un valle de admirables imágenes, el viento cálido de verano acariciaba mi rostro como la mano de una dulce amante. Dejándome llevar por esa tranquilizante sensación de paz llegue con mi mirada hacia el horizonte, clavado en aquella visión inmensamente hermosa me aleje de toda la irracionalidad del mundo, ahí estaba, en la inmensa bóveda, tranquila, serena, paciente… la luna, hermosura de hermosuras, pendiente de la danza de la luciérnagas entre el pasto crecido a mi alrededor, vacilante subí a una colina en el centro de aquel valle, quise alcanzar con mis manos aquella perla azulada,- mírame, hermosa dama de los cielos, quiero tenerte para mi, quiero tener tu dulce luz y tu perfecta figura- grite tan alto como pude tratando que me escuchase aquel invaluable trozo de universo.
-he venido a ti mi señora, eme aquí para apreciarte y amarte toda la eternidad- ella miro hacia abajo y me observo con su rostro pintado de estrellas. Su mirada me cautivo y estuve a su merced. Desde aquel día cada noche recorría el valle a su lado, admirándola, amándonos entre la suave maleza que tapiza la tierra suelta de este rincón fantástico.
No puedo describir con facilidad las sensaciones que arremetían contra mi cada que estaba cerca de ella, mi mirada prisionera de sus ojos, mis manos esclavas de su piel, mi razón atravesada por sus palabras. Mi ser paralizado por su belleza no comprendía tales momentos de gracia.
sábado, 4 de julio de 2009
Mil veces
Estoy en mi cama, casi desnudo, disfruto de un cálido atardecer de verano, me sumerjo en un sueño superficial, te recuerdo, cada minúscula parte de ti me llama. El viento se escabulle entre las pequeñas separaciones de la ventana y la pared, se desliza a través de mi cuarto y me cubre con su tibio manto, sigo pensando en ti, evoco el dulce aroma de tu piel, el fresco olor de tu cabello cuando sales de bañarte, tu deliciosa figura desnuda, húmeda y radiante, ni los dioses han tenido imagen mas bella que la tuya. Te recuerdo, viajas por mi mente y haces estragos poéticos en mi alma, me enciendes en un frenesí de éxtasis y gozo, te susurro al oído palabras que ya no escucharas, tu tersa piel sobre la mía, tus manos en mi vientre, tus labios en mi pecho. Te evoco desde el lecho de mi fantasía mas preciada, quiero tenerte mil veces más.
Te recuerdo, en mi alma, en mi carne. Estoy en mi cama extasiado de ti, de tu piel, de tu cuerpo, riguroso poema de perfección. Te veo entrar por la puerta, tus bellas prendas caen al suelo lentamente, el sol entra por la ventana y su halo resalta tu divina naturaleza, te acercas a mí y me miras con ternura, tus labios hinchados de deseo y tus pechos que bailan al ritmo de tus caderas, enloquezco y desespero. Me atrapas, me dominas y ¿qué puedo hacer yo ante tales fuerzas? te miro a los ojos, perlas del mar que esclavizan mi mirada. Tus manos recorren mi cuerpo, desde mis pies hasta mi nuca y yo no puedo más que apreciar tu belleza. Tu lengua incita a mi cuello y tu vientre a mi sexo.
Me provocas con tal calma, desespero en tus magníficos dotes. Te tomo de tu cintura y comienzo a devorar tu cuerpo, dulce fruta divina que me condena a ti, mis manos inquietas juegan en tu espalda recorriendo tu geografía de norte a sur, este a oeste; siento tus piernas atrapándome, sujetándome, tu manos en mi rostro guían mis labios al recorrer los tuyos, tus muslos tersos y cálidos, tu cabello alborotado victima de mi deseo. Mi lengua en tu cuello, mis brazos en tus hombros, mi corazón en tus manos.
Estas acostada en mi cama, tus pechos expuestos al viento que se cuela a la habitación, tus ojos cerrados, tus labios hinchados y tu rostro extasiado, beso tus pies, viajo por tu pantorrilla hasta tus piernas, mis dedos acompañan tan minucioso recorrido. Tu aroma invade mi nariz, me hipnotiza, me enciende, llego al cáliz de tu ser y saboreo tu miel. Mi boca besa tu sexo, mi lengua lo acaricia, tan húmedo, tan suave, lo disfruto como nunca he disfrutado otro placer de la vida, te muerdo y te aprieto con mis manos con una fuerza sobrenatural. Ceñido entre tus piernas te disfruto con júbilo, te beso y brincas de gozo, te lamo y gimes enigmática. Virtud de virtudes, gracia de gracias, cuerpo de musa, inspiradora belleza que me has permitido entrar en tu canto, quiero amarte siempre, quiero sentirte en mí.
Te recuerdo y vibro al sentirte mía. La tarde avanza, los moribundos rayos del sol acarician los últimos rincones del muro junto a mi cama, sigues ahí, beso tu espalda, estoy sobre ti, acaricio tus pechos de seda, jalo tu cabello, embravecido por tu ardiente suspirar, tomo tus muslos y los colapso hacia mi pelvis, te siento explotar en un mar de sensaciones, te estremeces y me elevo aun más. Una y otra vez desde tu espalda dibujo con lasciva mirada tu silueta, perpetua diosa del placer, no me abandones ahora, déjame disfrutarte en mis más profundos sueños.
Entre tus piernas me pierdo, exquisita mujer de cuerpo mágico, mis brazos son testigos de tus caricias y mis manos culpables de tus roces. Mis labios cazadores de tu sabor, mi piel lienzo de tu querer. Tus labios exclaman sin poder gritar, te beso con calidez, te acaricio sin dejar milímetro fuera de mis manos… oh placer que me haces morir de sensaciones maravillosas. Te retorno a mis brazos y te hago mía una vez más. Quiero acariciarte hasta desgastarte, besarte hasta secarme, abrazarte hasta cansarme y amarte por la eternidad. La pálida luz del ocaso muerto se aleja de la ventana, estoy acostado en mi cama, mis pensamientos te velan, mi corazón te añora y mi alma te llora. ¿A dónde te has fugado preciosa flor de Liz? ¿En donde puedo volverte a encontrar? Regresa a inundar mi habitación de luz radiante, de tu belleza, regresa y dame felicidad, regresa y siénteme mil veces más, pues no solo en carne quiero quedar, quiero tu alma también poder tocar.
Estoy en mi cama, casi desnudo, disfruto de un cálido atardecer de verano, me sumerjo en un sueño superficial, te recuerdo, cada minúscula parte de ti me llama. El viento se escabulle entre las pequeñas separaciones de la ventana y la pared, se desliza a través de mi cuarto y me cubre con su tibio manto, sigo pensando en ti, evoco el dulce aroma de tu piel, el fresco olor de tu cabello cuando sales de bañarte, tu deliciosa figura desnuda, húmeda y radiante, ni los dioses han tenido imagen mas bella que la tuya. Te recuerdo, viajas por mi mente y haces estragos poéticos en mi alma, me enciendes en un frenesí de éxtasis y gozo, te susurro al oído palabras que ya no escucharas, tu tersa piel sobre la mía, tus manos en mi vientre, tus labios en mi pecho. Te evoco desde el lecho de mi fantasía mas preciada, quiero tenerte mil veces más.
Te recuerdo, en mi alma, en mi carne. Estoy en mi cama extasiado de ti, de tu piel, de tu cuerpo, riguroso poema de perfección. Te veo entrar por la puerta, tus bellas prendas caen al suelo lentamente, el sol entra por la ventana y su halo resalta tu divina naturaleza, te acercas a mí y me miras con ternura, tus labios hinchados de deseo y tus pechos que bailan al ritmo de tus caderas, enloquezco y desespero. Me atrapas, me dominas y ¿qué puedo hacer yo ante tales fuerzas? te miro a los ojos, perlas del mar que esclavizan mi mirada. Tus manos recorren mi cuerpo, desde mis pies hasta mi nuca y yo no puedo más que apreciar tu belleza. Tu lengua incita a mi cuello y tu vientre a mi sexo.
Me provocas con tal calma, desespero en tus magníficos dotes. Te tomo de tu cintura y comienzo a devorar tu cuerpo, dulce fruta divina que me condena a ti, mis manos inquietas juegan en tu espalda recorriendo tu geografía de norte a sur, este a oeste; siento tus piernas atrapándome, sujetándome, tu manos en mi rostro guían mis labios al recorrer los tuyos, tus muslos tersos y cálidos, tu cabello alborotado victima de mi deseo. Mi lengua en tu cuello, mis brazos en tus hombros, mi corazón en tus manos.
Estas acostada en mi cama, tus pechos expuestos al viento que se cuela a la habitación, tus ojos cerrados, tus labios hinchados y tu rostro extasiado, beso tus pies, viajo por tu pantorrilla hasta tus piernas, mis dedos acompañan tan minucioso recorrido. Tu aroma invade mi nariz, me hipnotiza, me enciende, llego al cáliz de tu ser y saboreo tu miel. Mi boca besa tu sexo, mi lengua lo acaricia, tan húmedo, tan suave, lo disfruto como nunca he disfrutado otro placer de la vida, te muerdo y te aprieto con mis manos con una fuerza sobrenatural. Ceñido entre tus piernas te disfruto con júbilo, te beso y brincas de gozo, te lamo y gimes enigmática. Virtud de virtudes, gracia de gracias, cuerpo de musa, inspiradora belleza que me has permitido entrar en tu canto, quiero amarte siempre, quiero sentirte en mí.
Te recuerdo y vibro al sentirte mía. La tarde avanza, los moribundos rayos del sol acarician los últimos rincones del muro junto a mi cama, sigues ahí, beso tu espalda, estoy sobre ti, acaricio tus pechos de seda, jalo tu cabello, embravecido por tu ardiente suspirar, tomo tus muslos y los colapso hacia mi pelvis, te siento explotar en un mar de sensaciones, te estremeces y me elevo aun más. Una y otra vez desde tu espalda dibujo con lasciva mirada tu silueta, perpetua diosa del placer, no me abandones ahora, déjame disfrutarte en mis más profundos sueños.
Entre tus piernas me pierdo, exquisita mujer de cuerpo mágico, mis brazos son testigos de tus caricias y mis manos culpables de tus roces. Mis labios cazadores de tu sabor, mi piel lienzo de tu querer. Tus labios exclaman sin poder gritar, te beso con calidez, te acaricio sin dejar milímetro fuera de mis manos… oh placer que me haces morir de sensaciones maravillosas. Te retorno a mis brazos y te hago mía una vez más. Quiero acariciarte hasta desgastarte, besarte hasta secarme, abrazarte hasta cansarme y amarte por la eternidad. La pálida luz del ocaso muerto se aleja de la ventana, estoy acostado en mi cama, mis pensamientos te velan, mi corazón te añora y mi alma te llora. ¿A dónde te has fugado preciosa flor de Liz? ¿En donde puedo volverte a encontrar? Regresa a inundar mi habitación de luz radiante, de tu belleza, regresa y dame felicidad, regresa y siénteme mil veces más, pues no solo en carne quiero quedar, quiero tu alma también poder tocar.
UELCOM
ke tal banda, bienvenuti a este su blog de confianza, espero y les agrade lo que estare publicando por estos lados, cuidense y los dejo con un texto de mi peculio... no piensen mal osea hecho por yo zas disfrutenlo.
Encuéntrame
Soledad que me acompaña estos oscuros días, sumergido en el abismo oscuro y frío. Dime, ¿quién ha merecido más que yo tu presencia? ¿Quién ha sido capaz de arrebatarte de mi lado? Te añoro cada noche antes de dormir, te busco cada día al despertar, no huyas más de mi, muéstrame tu rostro tan solo una vez. Te admiro desde lejos, te deseo con fervor, susúrrame al oído, déjame sentir tu cálido aliento, deja que me guie a las fantasías desconocidas por el hombre, dame esa gracia, quiero sentir tus brazos estrechando mi cuerpo, arrebatándome el aliento. Acércate a mi y libérame hermoso poema incomprendido, acércate a mi te lo imploro, sálvame.
¿Por qué huyes de mí? Dame la paz, déjame sentirte solo una vez, ven a mí, dame el descanso, ven a mí y dame paz amada muerte.
ke tal banda, bienvenuti a este su blog de confianza, espero y les agrade lo que estare publicando por estos lados, cuidense y los dejo con un texto de mi peculio... no piensen mal osea hecho por yo zas disfrutenlo.
Encuéntrame
Soledad que me acompaña estos oscuros días, sumergido en el abismo oscuro y frío. Dime, ¿quién ha merecido más que yo tu presencia? ¿Quién ha sido capaz de arrebatarte de mi lado? Te añoro cada noche antes de dormir, te busco cada día al despertar, no huyas más de mi, muéstrame tu rostro tan solo una vez. Te admiro desde lejos, te deseo con fervor, susúrrame al oído, déjame sentir tu cálido aliento, deja que me guie a las fantasías desconocidas por el hombre, dame esa gracia, quiero sentir tus brazos estrechando mi cuerpo, arrebatándome el aliento. Acércate a mi y libérame hermoso poema incomprendido, acércate a mi te lo imploro, sálvame.
¿Por qué huyes de mí? Dame la paz, déjame sentirte solo una vez, ven a mí, dame el descanso, ven a mí y dame paz amada muerte.
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